Hay locos del motor... y luego existen locos del motor con mucho dinero. Es el caso del protagonista de esta noticia, que ha sido capaz, tanto moral como económicamente, de poner un Pagani Zonda Revolucion en el salón de su casa.
Pero espera... antes de que comiences a maldecir y de que empieces buscar un muñeco para hacer voodoo a Pablo Pérez Companc, el hijo del hombre más rico de Argentina, he de decirte que este 'biombo' tan especial que separa el salón de su apartamento de Miami, carece de propulsor y de componentes mecánicos.
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Como buen amante del motor, Companc ha manifestado que para él, el deportivo, "es solo una obra de arte". Asimismo, añade que "nunca castigaría a un Black Minion a estar encerrado en una sala de estar. Los coches de carreras son para conducirlos". Y eso lo dice un orgulloso propietario de un Pagani Huayra BC y de un Zonda Revolucion.
