El Cupra Terramar apunta a ser el nuevo superventas de la marca española, un SUV de claro aire deportivo que, para su lanzamiento, ha unido fuerzas con la Louis Vuitton 37ª America’s Cup y el resultado ha sido a edición limitada Cupra Terramar America’s Cup.
Solo se fabricarán 1.300 unidades del modelo, que estará disponibles con las mecánicas más potentes del vehículo, las que llevan el apellido VZ.
Cupra Terramar, el nuevo SUV español que puede convertirse en la referencia en su clase
Así, dejando de lado el motor gasolina de acceso de 150 CV, puede combinarse con el sistema de propulsión híbrido enchufable de 272 CV por un precio que arranca en los 55.570 euros o con el bloque térmico 2.0 TSI de 265 CV, que está disponible desde 57.283 euros.
A nivel de diseño, esta edición se distingue por un color de carrocería exclusivo, el Gris Enceladus Mate, que se combina con unas llantas de aleación negras de 20 pulgadas, el logo de la America’s Cup adorna tanto el exterior como el interior y detalles en el habitáculo hechos de cuero y alcántara.
Sin embargo, la marca española ha querido ir un paso más allá y ha conseguido que un ejemplar de esta serie no sea capaz solo de rodar, si no que también sea capaz de navegar por el mar.
Para ello Cupra ha colaborado con los expertos de ingeniería náutica de Brava Boats y con Vetus, diseñando una base a medida para el coche, parecida a la de un trimarán, capaz de soportar hasta 2.500 kg.
Ignasi Prieto, Chief Brand Officer de Cupra, ha declarado: “En Cupra siempre nos gusta innovar más allá del mundo de la automoción, llevando nuestra actitud disruptiva a ámbitos inesperados. El Cupra Terramar America's Cup es un gran ejemplo de ello: una versión de nuestro nuevo coche que navega en el mar, llevando nuestra marca al corazón de la competición”.
Por su parte, Enrique Madruga, responsable del equipo de Coches Especiales en el Centro de Prototipos y Preseries en Cupra, añade: “Se han integrado los mandos electrónicos de maniobra y propulsión en el puesto del conductor, que son especiales para embarcaciones, e independientes del coche”.
“Estas modificaciones aseguran una transición fluida entre las funciones del coche y la plataforma, permitiendo conducir sobre el agua directamente desde el interior del vehículo, pero manteniendo intactas el resto de las funcionalidades del producto en sí”, concluye.