El diseño es, quizá, lo más importante de un coche. Muchos de los que van a comprar uno se acaban decidiendo por él porque le ha entrado por los ojos. Es por eso que hay coches de producción con imagen retro que no triunfan. De todas formas, tampoco es que sea cierta la afirmación que dice que 'segundas partes nunca fueron buenas'; y te lo vamos a demostrar. Porque hay otros cuantos coches de producción con imagen retro que sí que han sido todo un éxito:
Jeep Renegade
El Jeep Renegade es un modelo que salió al mercado no hace muchos años, pero que conserva esa imagen tan 'Jeep' con sus faros redondos, una forma cuadrada y unos pilotos traseros realmente originales. Lógicamente, cuenta con todas las protecciones plásticas pertinentes de su segmento. Es uno de los modelos más vendidos de la marca en todo el mundo.
Audi TT
Ahora ya está a punto de desaparecer, pero cuando el Audi TT llegó al panorama automovilístico a finales de la década de los '90, revolucionó el mundillo de los deportivos con su diseño retro. Con el paso de los años ha ido aburguesándose en todos los sentidos, pero siempre nos quedará el recuerdo de una primera generación que fue mítica.
Suzuki Jimny
El nuevo Suzuki Jimny ha logrado algo complicadísimo de conseguir: una crítica excelente de manera casi unánime. Conserva todas las bondades de su antecesor, ya que es realmente efectivo fuera del asfalto a cambio de un precio muy económico. Pero además añade esa imagen de coche juguetón y divertido, con un aspecto que parece sacado de los '90.
Fiat 500
El Fiat 500 es, quizá, el mejor ejemplo de que segundas partes pueden ser no buenas, sino muy buenas. Se trata, simple y llanamente, del salvador de la marca italiana gracias a su volumen de ventas. Cuenta con un aspecto retro pero adaptado a los gustos modernos, y sus pequeñas dimensiones y el hecho de que se pueda personalizar le convierten en una de las opciones más chic de todo el mercado.
Abarth 595
Podría pensarse que el Abarth 595 es el mismo modelo que el coche anterior. Y realmente lo es por diseño. Pero ahí se acaban todas sus similitudes. La gama de motores mucho más potente y un comportamiento mucho más radical hacen que sean vehículos totalmente diferentes. Y sí; también es uno de los coches de producción con imagen retro que han triunfado.
Mini
Desde la reedición del Mini cuando BMW se hizo con la marca británica, todos los modelos de la firma han triunfado. Es verdad que son coches muy divertidos de conducir, con una filosofía premium y muchos detalles que lo hacen 'pijo' y atractivo. Pero lo mejor de todo es que sea uno de los coches de producción con imagen retro más representativos del modelo del que descienden.
Ford Mustang
El Ford Mustang lleva ya muchas décadas entre nosotros. O bueno, en el mercado, ya que hasta la generación actual no se comercializó directamente en Europa. Y con el paso de los años ha sabido ir evolucionando en su diseño, pero conservando su imagen de pony car intacta. Salvo algún que otro eslabón perdido entre generaciones, eso sí. Pero el caso es que a día de hoy sigue manteniendo su esencia.
Jeep Wrangler
El Jeep Wrangler es uno de los todoterreno mejor valorados en todo el mundo. A sus capacidades fuera del asfalto hay que sumar un montón de versiones que hacen que sea un modelo muy personalizable y adaptable a los gustos de casi todo aquel que busca comprarse un coche de sus características. Y por supuesto, en su imagen retro está uno de los sellos que le hacen ser tan exitoso.