El Volkswagen Golf VIII está prácticamente recién salido del horno: la nueva generación del popular compacto alemán salió a la luz el pasado mes de diciembre y, por eso, todavía no le ha dado tiempo a ningún preparador a ‘meterle mano’. Hasta ahora, y es que ABT Sportsline ha presentado el primer trabajo de tuneo que vemos sobre el modelo.
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Eso sí, vaya por delante que quien espere una obra grande, que afecte a todos los aspectos del vehículo y mejore su apartado mecánico, quizá se lleve una pequeña desilusión, puesto que la compañía ha optado por algo más sencillo y sutil.
Lo que más llaman la atención son los nuevos juegos de llantas disponibles. El preparador ofrece unas ER-C que se pueden elegir en tamaños de 18 o 19 pulgadas, que van acompañadas de neumáticos de 225/40 y 225/35, respectivamente. Para quienes se queden cortas, también se puede optar por unas de 20 pulgadas, de diseño específico y acabadas en negro, que van envueltas en gomas de 235/30.
Además de esto, el Volkswagen solo recibe otra modificación que se aplica a su suspensión. Un paquete de amortiguadores ayuda a rebajar la altura de la carrocería entre 25 y 30 mm, dependiendo del motor que monte el Golf. Cuentan, además con el sistema de control de chasis adaptativo, lo que mejora el comportamiento del compacto.
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Aunque por el momento es una oferta algo limitada, ABT Sportsline ya adelanta que está trabajando en otras muchas y que espera que para antes de verano estén disponibles mejoras de rendimiento para algunas de las motorizaciones diésel y gasolina del Golf VIII.