El ya expresidente de Estados Unidos aprovechó sus últimas horas en la Casa Blanca para repartir absoluciones a diestro y siniestro. Entre las personas que recibieron esta amnistía estaba Anthony Levandowski. En efecto, Donald Trump ha indultado al exingeniero de Google acusado de robar información sobre su coche autónomo para fundar su propia empresa, que más tarde fue adquirida por Uber.
Por si hay alguien que no conoce la historia, vamos a recordarla. Desde 2017, Google y Uber mantienen un enfrentamiento abierto por el supuesto robo de patentes. Anthony Levandowski trabajaba en Waymo, la división de coches autónomos de Alphabet que es la propietaria del famoso buscador. Antes terminar su etapa allí y mientras negociaba un nuevo cargo con Uber, transfirió más de 14.000 archivos, incluidos los programas de desarrollo y los diseños de productos, a su portátil personal.
Cuando salió, Anthony Levandowski montó Otto: una compañía de camiones autónomos que, meses después, fue comprada por Uber. Google no tardó en comenzar una batalla por el robo de datos en un proceso que duró hasta finales de 2018. El buscador exigía un pago de 1.000 millones de dólares (825 millones de euros) en concepto de daños y perjuicios. Cuando faltaban tres días para que se celebrase el juicio, las dos partes lograron llegar a un acuerdo: Uber daría una participación accionarial a Google por valor de 245 millones de dólares (200 millones de euros).
¿Y Anthony Levandowski?
El proceso de Anthony Levandowski seguía abierto. El pasado mes de agosto, el juez William Alsup lo declaró culpable de los delitos que se le atribuían: robo de secretos comerciales y propiedad intelectual en favor de Uber. Fue condenado a pagar 179 millones de dólares (147 millones de euros) a Google por apropiación de información confidencial.
A esto hay que añadir la pena de 18 meses de prisión y aunque debía haber entrado en prisión hace tiempo, la pandemia había impedido que comenzase a cumplir la pena. Ahora, gracias al indulto de Trump, quedará libre de cargos: “Levandowski ha pagado un precio significativo por sus acciones y planea dedicar su talento a trabajar en bien del público”. Una decisión que ha sido apoyada por otras figuras de la industria tecnológica como Peter Thiel (cofundador de PayPal o Palantir e inversor de Facebook) o Palmer Luckey, cofundador de Oculus.