El Toyota Hilux es uno de los pick-ups más veteranos del mercado, pero desde hace no mucho cuenta con una versión de bajo coste, el Toyota Hilux Champ, que solo se vende en ciertas zonas del mundo. Tailandia es una de ellas, y ahora la división tailandesa de Toyota lo ha utilizado de base para crear un camión de carreras.
El modelo, de hecho, ya ha participado en varias pruebas del campeonato Super Pickup local, luciendo una imagen mucho más radical y deportiva de lo que habitúa, pero con modificaciones mecánicas mínimas.
El Toyota Hilux estrena motor diésel híbrido ligero de 48 V con 204 CV y etiqueta ECO
Esto se debe a que la normativa del campeonato tampoco es muy exigente, siendo los requisitos a cumplir el ser un pick-up equipado con un motor diésel, con tracción trasera y que el formato de la carrocería sea el de cabina simple.
Su diseño es lo que llama la atención y es que sus formas rectilíneas se han llevado a un nuevo nivel. Entre los elementos que son fácilmente reconocibles solo se pueden contar los faros delanteros, puesto que lo demás ha experimentado una transformación considerable.
En el frontal hay una enorme entrada de aire ocupando el centro del paragolpes, éste se ha rebajado, cuenta con un labio y también se ha ensanchado; los pasos de rueda son muy musculosos, hay refuerzos en la caja de carga para reforzar la rigidez del vehículo y en la zaga hay un alerón bastante voluminoso.
El interior se ha despejado para eliminar cualquier elemento que no sea imprescindible y se ha instalado una jaula antivuelco.
En cuanto a motor, hay mejoras, pero tampoco se trata de una locura. De hecho, bajo el capó mantiene el mismo motor que el modelo convencional, un bloque 2.4 turbodiésel, aunque para la ocasión se ha potenciado hasta los 150 CV.
Para conseguirlo se han llevado a cabo modificaciones como la instalación de un turbo nuevo, intercoolers de mayor tamaño, tomas de admisión específicas y un sistema de escape personalizado. La caja de cambios manual sigue siendo igual y manda la potencia al eje trasero. La marca no ha desvelado sus prestaciones.
Además, el chasis ha experimentado una puesta a punto, rebajando la suspensión y se ha configurado una caída negativa para mejorar el comportamiento dinámico de la camioneta. La guinda la ponen los neumáticos de competición.
