Son varios los coches de ‘A todo gas’ que son famosos y fácilmente reconocibles por los fans de la saga. De entre todos ellos, el Skyline GT-R R34 que apareció en la cuarta película es uno de los más especiales por su diseño limpio y deportivo. Pues bien. Tan importante es el Nissan Skyline GT-R R34 de ‘Fast & Furious 4’ que la semana pasada se subastó por más de un millón de euros.
Esto convierte al Skyline GT-R que apareció en la película en el Nissan más caro vendido en una subasta. Concretamente, el mejor postor se lo llevó por 1,18 millones de dólares (1,07 millones de euros), o 1,36 millones de dólares (1,23 millones de euros) si se incluyen las tasas de la subasta en el precio.
Subastado el Nissan Skyline GT-R de ‘Fast & Furious 4’ por más de un millón de euros
Bonhams
El vehículo en cuestión fue importado a Estados Unidos sin motor por Kaizo Industries en 2007. La idea era reacondicionarlo con un motor RB26DETT adquirido después de comprar el coche, cambiarlo a la modalidad de kit car y eludir así la normativa de importaciones de vehículos japoneses de menos de 25 años.
A subasta un Ferrari F40 que perteneció a Alain Prost
Sin embargo, esto no tuvo éxito y el coche fue incautado por funcionarios de aduanas poco después de que concluyera el rodaje de ‘Fast & Furious 4’. Más tarde sería exportado a los Países Bajos, aunque el Skyline GT-R nunca fue registrado en Europa, donde ha permanecido hasta ahora que se ha subastado por la prestigiosa casa Bonhams.
Mucho más interesante es la lista de mejoras que se instaló en el coche para aparecer en la taquillera franquicia de ‘A todo gas’. Por ejemplo, el coche está equipado con un intercooler nuevo y un sistema de escape Nismo. También se han aumentado los niveles de presión de turbo e inyección de combustible para que el famoso bloque de seis cilindros en línea biturbo de 2.6 litros ahora produzca 550 CV de potencia.
A nivel estético, fue el propio Paul Walker, que lo conduciría en la ficción cinematográfica, quien decidió qué se le debía instalar al vehículo. Resulta llamativo que sea uno de los pocos coches de las primeras entregas que no presenta decoraciones barrocas ni calcomanías en su carrocería. Solo una interesante pintura azul y unas nuevas llantas, así como un capó revisado, parachoques Nismo y taloneras laterales. El actor que interpretaba a Brian O’Conner pidió que se cambiara el color de las luces antiniebla traseras.
Si quieres rememorar las escenas del Nissan Skyline GT-R de ‘Fast & Furious 4’, en el artículo encontrarás un par de vídeos con sus mejores momentos.
Fotos: Bonhams