En un verano en el que los cines están dominados por Barbenheimer (esa curiosa lucha entre Barbie y Oppenheimer, que se estrenaron el mismo día), los aficionados al mundo del motor y a los videojuegos también tienen su pequeño hueco en las salas: el próximo 11 de agosto se estrena Gran Turismo. Además, para quien no sea suficiente verla, también podrá hacerse con el Nissan GT-R de la película.
De hecho, el modelo que sale a subasta no solo ha participado en el film, que cuenta la historia de Jann Mardenborough, si no que también es el coche que el propio piloto condujo en la GT Academy de verdad.
Nissan está trabajando en un GT-R R32 eléctrico
Actualmente es propiedad de Darren Cox, creador del concepto y que está interpretado por Orlando Bloom en la película.

El coche luce el color blanco original, pero durante una época fue de color negro. Esto se debió a que en un incidente entre el Nissan GT-R NISMO GT3 de Mardenborough y otro vehículo, en las Nürburgring Endurance Series (VLN), un espectador resultó muerto. Además de este lance, el modelo ha participado en varias competiciones a lo largo de su carrera, siendo su momento más destacado el noveno puesto que logró en las 24 Horas de Nürburgring en 2015.
Desde que el Nissan terminó su carrera ha vivido una vida tranquila hasta que ha vuelto a usarse en Gran Turismo, donde el piloto ha tenido la oportunidad de reencontrarse con su bólido para conducirlo de nuevo. Además, también se ha empleado en materiales promocionales para la película.

El Nissan GT-R de la película Gran Turismo se va a subastar en Silverstone Auctions, concretamente en el Silverstone Festival 2023 que se celebra el próximo día 25 de agosto. Según la compañía, la puja ganadora podría situarse entre las 225.000 y las 275.000 libras esterlinas, lo que al cambio actual suponen entre 260.000 y 319.000 euros.