No hace falta ni salir de nuestras fronteras para encontrar la subasta de un BMW 320i E30 que está en un estado prácticamente inmaculado, un ejemplo de cómo cuidar un coche que, por primera vez en su historia, busca cambiar de manos.
Se trata de un ejemplar de 1991 solo ha tenido un dueño durante los últimos 32 años, que lo ha mantenido con todo lujo de cuidados y es que, en términos generales, parece que está nuevo.
Luce el color Delphin Metallic en la carrocería, que no presenta más desperfectos que las lógicas “picadas” por chinas o pequeños arañazos. Calza llantas de 14 pulgadas envueltas en neumáticos Michelin MXV y todo en él es original salvo por un elemento, el sistema de escape, que fue reemplazado por uno de Bosal.
El interior presenta un volante de cuatro radios, asientos de tela gris, elevalunas delanteros eléctricos y retrovisores ajustables electrónicamente. La tapicería está ligeramente sucia pero no presenta ningún desperfecto y las únicas marcas que se pueden encontrar son en el techo y la puerta del copiloto, así que en términos generales su condición es muy buena.
Monta un motor gasolina 2.0 de seis cilindros en línea que desarrolla una potencia de 129 CV y un par máximo de 174 Nm, que manda la fuerza al eje trasero a través de una caja de cambios manual de cinco velocidades. La clave está en que su uso ha sido realmente escaso porque, a pesar de tener más de tres décadas de trayectoria, solo cuenta con 27.251 kilómetros en su haber.
El BMW está acompañado de una gran cantidad de documentación, así como de los registros de los pasos por el taller durante toda su vida y pasó su última ITV en diciembre de 2021.
El BMW 320i E30se encuentra en Tarragona y se está subastando por Collecting Cars. En el momento de escribir estas líneas todavía quedan tres días para que se cierre la subasta, se han llevado a cabo 17 pujas y la más alta es de 7.600 euros.
