Desde abril de 1996 a abril de 2016, el Skoda Octavia celebra su 20º aniversario como uno de los pilares centrales de la firma checa. Con más de cinco millones de unidades vendidas en dos décadas y con tres generaciones a sus espaldas, el Octavia es una muestra de la polivalencia de la berlina compacta, que ofrece, además, carrocería familiar, versiones 4×4 y las potentes variantes RS.
Todo se remonta a 1992, un año después de que Skoda se uniera al Grupo Volkswagen, se inicia el proyecto de desarrollo inicial del modelo completamente nuevo Octavia. Se adopta una plataforma de nuevo desarrollo, se crea una estructura robusta de carrocería y el equipo de diseño de la firma checa, liderado por el Diseñador Jefe Dirk van Braeckel, creaba la forma de la carrocería de la primera generación en el centro de desarrolo en Mladá Boleslav.
Se puso especial atención al desarrollo de la seguridad activa y pasiva, con airbags frontales y laterales (toda una novedad en la marca), así como el portón trasero liftback que permitía el acceso a un compartimento de carga de 528 litros ampliables a 1.328 litros si se abatían los asientos traseros.
Llega el año de lanzamiento, 1996, y el Skoda Octavia de primera generación se presenta con dos motores de gasolina de cuatro cilindros y un propulsor turbodiésel. El motor de acceso a gama del sedán es el 1.6 MPI de 75 CV, mientras que el 1.8 litros de 20 válvulas se situaba en la cima con 125 CV. La antonomasia era el motor turbodiésel de inyección directa 1.9 TDI con 90 CV. Más tarde se añadió un motor más económico 1.9 SDI de 68 CV y un 1.8 20V de 150 CV turbo.
Se requirieron de dos años adicionales para que Skoda lanzara la variante familiar, el Octavia Combi. El estreno mundial tuvo lugar en 1998 en el Salón del Automóvil de Ginebra, llegando al mercado en mayo de ese mismo año. La variante familiar se convirtió rápidamente en todo un superventas apoyando el éxito de la familia Octavia, mientras que en 1999 debutó el Octavia Combi con tracción a las cuatro ruedas.
Pese a que a mediados de la década del 2000 llegó la segunda generación del Skoda Octavia, la primera no cesó su producción hasta noviembre del 2010 y durante los 14 años que estuvo en activo se fabricaron 970.000 berlinas y 470.000 modelos familiares en todo el mundo. La segunda generación no cesó en este empeño, produciendo 1,6 millones de berlinas entre 2004 y 2013 y 900.000 familiares en el mismo período. Tecnologías como los motores de gasolina de inyección directa y la caja de cambios automática DSG hicieron su debut en esta segunda generación.
La tercera generación del Skoda Octavia llegó en noviembre de 2012 a los mercados y a finales de marzo de 2016 se han alcanzado el millón de unidades producidas de esta generación. En total se han contabilizado cinco millones de Octavia desde el primer lanzamiento del modelo en 1996. China, India, Rusia y Kazajistán complementan la producción de la planta principal de Mladá Boleslav, en la República Checa.
Destaca, por otro lado, la polivalencia del Skoda Octavia. La berlina surgida en 1996 ha ido adaptándose a las diferentes opciones de carrocería que demandaban los clientes. Desde el Octavia Combi para familias, hasta el Octavia Scout destinado a los clientes más aventureros, un preludio de los SUV actuales, pasando por las variantes del Octavia RS, disponible en ambas carrocerías, así como la edición especial Octavia RS 230 y el Octavia RS 4×4.