PRUEBA: Audi TT Roadster y TTS Roadster 2015

Prueba-Audi-TT-Roadster-2015

El nuevo TT Roadster, al igual que el TTS Roadster 2015, mide ahora 4,18 metros de longitud con una batalla de 2,51 metros, por tanto sus voladizos son ahora más cortos. Su estampa sobre el asfalto parece atlética y concentrada. Los diseñadores de Audi han querido retomar las líneas maestras puras del primer TT, aunque, por supuesto, puestas al día con una nueva interpretación y formas más marcadas. Tanto el TTS Roadster 2015 de la prueba como los que llevan el paquete especial S re reconocen por detalles más radicales como las definidas entradas de aire o los aerodinámicos umbrales laterales.

Prueba Audi TT Roadster

En el frontal dominan las líneas horizontales. La parrilla single-frame es tan ancha y plana como la del prestacional Audi R8. En opción, puedes optar por los faros de LED o los que integran la innovadora tecnología de Audi Matrix LED, a base de diminutos diodos independientes que regulan la intensidad de las luces de carretera en función del resto de los vehículos.

Aunque incorpora numerosos elementos novedosos de la marca, también es cierto que gran parte de las soluciones estéticas recuerdan inevitablemente al modelo original, que ya hoy es un icono. Los anchos pasos de rueda forman un cuerpo geométrico, los delanteros cortan la fuga del capó que pasa por la cintura de la puerta hasta la zaga.

Prueba Audi TTS Roadster 2015 (5)

En la zaga, una serie de líneas horizontales remarcan la anchura del coche. El puente que une los pilotos LED traseros agrupa también las luces diurnas. La tercera luz de freno, una franja en el canto de la tapa del maletero, une los dos extremos. A partir de 120 km/h, un ‘spoiler’ emerge de dicha tapa hacia arriba. Con la capota cerrada, el Audi TT Roadster 2015 de la prueba logra un coeficiente aerodinámico de 0,30 cx, por lo que, aparte de un diseño único, la carrocería logra una baja resistencia al aire.

Con la mirada puesta en la resistencia a la torsión, los ingenieros de Audi han reforzado la carrocería al mismo nivel que la versión coupé. Esto lo logran los pilares a, los umbrales y la zona de debajo del morro y la zaga. Un sólido muro separa la celda de los pasajeros del espacio para equipaje, en la zona superior se erigen arcos de protección de acero tubular. Con el motor TFSI 2.0 y cambio manual, el TT Roadster arroja a la báscula un peso en vacío de solo 1.320 kilos.

Prueba Audi TT Roadster 2015 (1)

La capota de lona solo pesa 39 kilos. Al abrirla, se pliega tanto que apenas penaliza los 280 litros de capacidad del maletero. El accionamiento eléctrico de serie realiza la operación de apertura y cierre en 10 segundos, incluso conduciendo a una velocidad de hasta 50 km/h. Y la capota se mantiene estanca y sólidamente cerrada incluso a velocidades muy elevadas. Y la insonorización está realmente lograda. Para viajar descubierto, existen en opción un cortavientos y calefacción para el cuello en los también opcionales asientos deportivos S.

Como punto de partida, el TT Roadster 2015 se ofrece con un TDI y un TFSI. El TTS Roadster 2015 lleva asimismo un TFSI, pero más potente, ya que el dos litros rinde en este caso 310 CV y es más eficiente que el del modelo anterior. El sistema Start-Stop es de serie.

Prueba Audi TT Roadster 2015

El TT Roadster 2.0 TDI con cambio manual y tracción delantera (184 cv) solo consume una media de 4,3 litros y emite 114 gramos de CO2 por kilómetro: un nuevo récord en su segmento. El 2.0 TFSI del TT Roadster rinde 230 CV y 270 Nm de par, en el caso del TTS Roadster, los 310 mencionados y 380 Nm. Con el cambio S Tronic, el modelo tope de gama acelera de 0 a 100 km/h en solo 4,9 segundos. Y las válvulas del escape se encargan de darle aún mayor poderío al sonido.

Esta tracción es opcional en el Audi TT Roadster 2.0 TFSI y de serie en el TTS Roadster. Audi ha dado un gran paso evolutivo en este sistema, y ahora su embrague de varillas electrohidráulico reparte la fuerza en función de la situación y el tipo de conducción, para optimizar el funcionamiento de los dos ejes.

Prueba Audi TT Roadster 2015

El sofisticado chasis con su firme tarado proporciona a este biplaza descapotable un manejo dinámico y ágil, y sobre todo muy preciso. El control electrónico de estabilidad (ESC), que se puede desconectar totalmente o parcialmente, proporciona un aplomo soberbio. En curvas rápidas frena selectivamente la acción de la rueda adecuada, bien la interior anterior (en el caso de tracción delantera) o las dos interiores (con tracción quattro), de forma sutil. Esta diferencia de fuerzas redunda en un paso por curva ligero y preciso, muy neutral y estable.

Con formas musculosas y acabados de máxima calidad, más los nuevos colores y materiales, el interior de la nueva generación TT tiene un carácter muy deportivo. Visto desde arriba, el panel de instrumentos parece el de un avión, con los aireadores circulares, un detalle clásico de este modelo. Desde esos mismos aireadores se controla el climatizador automático.

Prueba Audi TT Roadster 2015

Los nuevos asientos, que ahora van montados más abajo y llevan los reposacabezas integrados, que ahorran cinco kilos respecto a los anteriores. Opcionalmente (en el TTS Roadster 2015) puedes acceder a los asientos deportivos S, que permiten mayores niveles de individualización, como la regulación eléctrica por un precio extra, o la variación del agarre lateral gracias a un sistema neumático que modifica el contorno.

Texto: Hans H. Grassmann (AutoReporter)
Fotos: Zbigniew Mazar (AutoReporter)

Dejar respuesta

Por favor, introduce tu comentario
Please enter your name here

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.