En las casas, como en los coches, hay niveles y niveles. No todas son iguales y, cuando se tiene dinero, es posible vivir en lugares espectaculares… y decorarlos de maneras que otras personas ni siquiera pueden permitirse soñar. Si eres suficientemente rico, puedes tener algo como un McLaren Senna GTR en el salón de tu hogar.
Suena excéntrico, pero es algo totalmente legítimo. Hay quien tiene las estanterías repletas de Funko Pop, pero cuando eres un multimillonario como el australiano Adrian Portelli, eso es equivalente a instalar un McLaren en una de las propiedades más caras de todo Australia.
McLaren Senna GTR, así es la nueva bestia de circuito
Portelli compartió hace unas semanas un vídeo de él haciendo donuts con el Senna GTR, una de las últimas interacciones del deportivo de uso exclusivo en circuito con todo lo referente a la conducción.

El millonario ha adquirido el piso 57 de una de las dos torres que forman el edificio Sapphire by the Gardens en Melbourne, una de las propiedades más caras del país, y, aprovechando que todavía se están construyendo, subió el McLaren hasta el lugar utilizando una gigantesca grúa. Él mismo afirma que posiblemente el deportivo británico se quede ahí para siempre, puesto que una vez que se termine de construir la planta será prácticamente imposible sacarlo de ahí.
El conjunto de piso y coche es francamente caro y es que el primero está valorado en 39 millones de dólares australianos, lo que al cambio son más de 25 millones de euros, mientras que el automóvil, cuando se presentó en 2019, lo hizo con una tarifa base de 1,9 millones de euros.
El modelo de la marca de Woking, del que solo se han fabricado 75 unidades, fue concebido como una versión más extrema y pensada exclusivamente para circuito del McLaren Senna de calle. Monta un motor 4.0 V8 biturbo de 825 CV y 800 Nm de par máximo, pesa 1.188 kilos y cuenta con una puesta a punto específica, así como con una aerodinámica que le permite generar hasta una tonelada de carga cuando circula a 250 km/h.