La semana pasada todas las miradas estaban puestas en SpaceX y su Starship, con un lanzamiento programado que en un primer momento tuvo que aplazarse por un problema técnico. Finalmente, el despegue tuvo lugar el jueves y, aunque finalmente no acabó bien puesto que la nave acabó explotando, desde la compañía de Elon Musk consideraron la operación un éxito.
Durante estos días no han dejado de salir datos e imágenes de todo lo ocurrido, pero quizá esta sea una de las más peculiares de todas, puesto que muestra los potenciales daños colaterales que pueden rodear un lanzamiento de estas características.
El canal de Youtube LabPadre estuvo en el evento, a cierta distancia (aparentemente estaba a un cuarto de milla, es decir, a 400 metros), y grabó todo el despegue con una cámara de gran angular.
Sin embargo, no calculó bien la potencia del cohete que propulsaba la nave, el denominado como ‘Super Heavy’, que con la ignición destrozó la plataforma de lanzamiento, haciendo que trozos de asfalto salieran despedidos en todas direcciones. En una de ellas se encontraba una pobre Dodge Caravan que, como podéis imaginar, no salió bien parada.
Colocada en la esquina inferior del vídeo, en el segundo 15 se puede ver claramente como un pedazo de asfalto de tamaño considerable impacta en la furgoneta en la parte trasera, destrozando por completo la zaga.
Además, aunque cuesta mucho verlo, de manera simultánea se aprecia otro impacto menor, que sale por la parte delantera del coche acompañado de lo que claramente parecen fluidos provenientes del motor. Así, mientras que los daños traseros no parecerían impedir el funcionamiento de la Caravan, ese golpe delantero más sutil seguramente haya supuesto el adiós definitivo para el monovolumen.
Sin embargo, esos dos primeros impactos no son más que un adelanto de lo que está por venir, y es que en los siguientes segundos se produce una auténtica lluvia de cascotes que termina de dañar tanto a la Dodge como el material que tiene montado sobre ella.
