Según informa AP News, General Motors pierde dinero en cada coche eléctrico que vende. Sin embargo, esto parece que está a punto de cambiar, ya que la compañía americana ya ha puesto fecha para no perder dinero con la venta de este tipo de vehículos. Será a partir de entonces cuando se produzcan coches con márgenes de beneficio más altos, se solucionen los problemas en la fabricación de batería y se reduzcan sus costes.
General Motors ha fijado 2025 como año en el que dejará de perder dinero al vender sus coches eléctricos. Paul Jacobson, director financiero de GM, dijo a los analistas la semana pasada que la compañía ha tenido dificultades para aumentar la fabricación de coches eléctricos, pero que ya las han solventado: “Si bien la rampa ha estado un poco llena de baches, lo hemos superado”.
Más específicamente, GM ha tenido problemas con la maquinaria que apila celdas de batería en módulos en su planta de Ohio, Estados Unidos, una fábrica que pertenece a una joint venture con la empresa coreana LG Energy Solution.
General Motors ya ha puesto fecha para no perder dinero con sus coches eléctricos
Jacobson dijo que los márgenes actuales de los vehículos eléctricos son “sustancialmente negativos”, ya que la compañía construye plantas de baterías, reequipa las fábricas y luego las utiliza por debajo de su máxima capacidad a medida que crecen la producción y la demanda de coches eléctricos.
El director financiero de General Motors también ha admitido que las ventas de coches eléctricos han desacelerado en Estados Unidos este año, pero la demanda continúa aumentando. De hecho, la compañía todavía espera aumentar la capacidad de la fábrica para producir un millón de coches eléctricos al año para finales de 2025, aunque no los fabricará todos si no hay demanda. “No quiero meter vehículos en un mercado que no los quiere”, dijo Jacobson, añadiendo que la compañía tampoco quiere vender coches eléctricos con grandes descuentos.
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Mientras que en junio del año pasado las ventas de coches eléctricos en Estados Unidos crecían a un ritmo de un 90%, en junio de 2023 la tasa de crecimiento ha caído al 50% y se ha mantenido sin cambios hasta octubre. Los fabricantes temen cada vez más que el ritmo se debilite aún más a consecuencia de las preocupaciones de los consumidores por los precios altos, la falta de puntos de carga y el temor a quedarse sin batería.
Por su parte, General Motors espera lograr que los coches eléctricos sean rentables distribuyendo los costes entre más vehículos a medida que aumentan las ventas, comercializando más vehículos eléctricos con mayor margen de beneficio y ahorrando en los costes de las baterías.
