Unos 4.000 euros es lo que tuvo que pagar un conductor canadiense en la elevada factura de reparación de los frenos de su Tesla Model S. La garantía no cubrió nada porque ya había expirado y el vehículo, tras cuatro inviernos, comenzaba a mostrar signos de desgaste de lo que, en principio, parecían ser las pastillas de freno, algo habitual tras los 104.000 kilómetros recorridos durante ese período.
Otro de los problemas que presentaba es que el año anterior había perdido la pastilla del freno de estacionamiento trasero derecho y ahora la del lado izquierdo mostraba los mismos signos. También mostraba otro inconveniente con los frenos, ya que como asegura el propietario, estos se mostraban algo ‘suaves’, pero en ningún momento estuvo preocupado por su seguridad.
Tras dejar su Tesla en el taller, el propietario recibió una llamada en la que le aseguraban que debía hacer frente a una factura de 8.500 dólares canadienses, lo que equivale a unos 5.825 euros al cambio actual, por la reparación de los cuatro pistones de freno. Por su parte, también descubrió que el fabricante aconseja revisar los frenos del vehículo una vez al año, y a pesar de que este no mostraba un gran desgaste en sus pastillas de freno y los discos, la factura seguía siendo desorbitada.
El conductor acabó pagando 850 euros por la pinza de freno de estacionamiento, 510 euros por el conjunto de la pinza de freno con los pistones, 225 euros por cada disco trasero y 200 euros en cada uno de los delanteros. Tesla también reemplazó el pedal del freno por 180 euros, a lo que debemos sumar toda la mano de obra de esta reparación.
La razón por la que acabó pagando casi 4.000 euros y no los 5.825 euros iniciales, se debe a que el taller logró salvar uno de los pistones y decidió no sumar los costes de mano de obra de esta parte a la factura del Tesla Model S. Mientras que el propietario asegura que la gente del servicio oficial de Tesla son geniales, no parecía tan encantado de tener que pagar esa factura por la sustitución completa de los frenos cuando los rotores y las pastillas ni siquiera estaban desgastados.
Fuente: Tesla Motors Club