Las copias chinas de coches conocidos son una realidad de la industria desde hace décadas. Sin embargo, el resultado no siempre es igual, hay ocasiones en las que la réplica está muy lograda y otras en las que el resultado es como mínimo cuestionable. En esta ocasión toca una de las segundas, pues parece como si hubieran compactado de mala manera a un Land Cruiser 300.
Encontrado por Carscoops, en la red social china llamada Weibo, lo cierto es que no se sabe prácticamente nada del coche, hasta el punto que ni siquiera se sabe si es un modelo de producción, un prototipo, un one-off o el trabajo de un preparador.
Cuando los chinos se van de vacaciones, provocan atascos así de monumentales
No ayuda a identificarlo el hecho de que el único nombre que se aprecia, el de Kuluze, que está en la zaga, no corresponda con ninguna marca de automóviles, y es que tras una rápida búsqueda en internet el único resultado relacionado que aparece es el de una marca de relojes.
Sea lo que sea, lo que está claro es que no han tenido ningún reparo en calcar de manera descarada todos los rasgos del Toyota aunque, claro está, aplicados a un formato tan pequeño y con unas proporciones no tan agraciadas, el resultado deja mucho que desear.

El vistazo del frontal es revelador, puesto que la parrilla es idéntica, hasta el punto que incluso el formato de las barras horizontales es calcado, así como la manera en la que se integran los grupos ópticos (que también son idénticos), la entrada de aire que la rodea, la del paragolpes y hasta los faros antiniebla.
La vista lateral es la que más se distancia del nipón, con una llantas muy pequeñas, gráficos surcando la carrocería y un color negro brillante tanto para los retrovisores como para los marcos de las ventanillas.
Tampoco la zaga está tan conseguida como el frontal y es que, aunque los pilotos y el paragolpes se dan un aire a los del Toyota Land Cruiser, la réplica no es ni de lejos tan precisa.