El Toyota Land Cruiser 2024 es el heredo de una legendaria estirpe de todoterrenos que se remonta al 1 de agosto de 1951. Nada menos que 72 años de evolución en los que la compañía japonesa ha logrado comercializar unas 11,3 millones de unidades en 170 países o regiones de todo el planeta y que han servido para forjar en gran medida la imagen de Toyota a nivel global.
Con el nuevo Land Cruiser 250 han querido crear un producto que vuelva a los orígenes del modelo. Un coche más simple y todavía más robusto que aprovecha los últimos avances tecnológicos para aumentar sus capacidades tanto en campo como en carretera. Y lo hace gracias a una carrocería de aspecto más retro que se combina con la plataforma TNGA-F de la marca.
Esto significa que por primera vez en la historia del Land Cruiser, el tope de gama de la familia (el Station Wagon, el Land Cruiser 300 que no se vende en Europa) y la serie Light Duty (el Land Cruiser 250 que nos ocupa) emplean el mismo chasis. Así, el recién llegado se beneficia de un importante salto en rigidez estructural, de la presencia de unas suspensiones con más recorrido o de la adopción de nuevas tecnologías para mejorar su desempeño sobre cualquier terreno.
Toyota Land Cruiser 250: un todoterreno auténtico
Pero también implica un notable aumento de tamaño. Porque con una longitud de 4.925 mm, una anchura de 1.980, una altura de 1.870 o una distancia entre ejes de 2.850 mm, el nuevo Land Cruiser 2024 es considerablemente más grande que el modelo al que reemplaza. ¿Cuánto exactamente? Pues es unos 100 mm más largo, 95 mm más ancho, 20 mm más alto y cuenta con una batalla 60 mm superior.
Este crecimiento va acompañado de una rediseñada imagen exterior que combina elementos de inspiración retro con detalles modernos. Un diseño más simple, con líneas más rectas y un aspecto más funcional gracias a la presencia de soluciones como unos paragolpes más recogidos. Estos, además, están divididos en secciones para que sea más sencillo y asequible sustituirlos en caso de necesidad.
Destacan también los grupos ópticos, que se ofrecen con dos configuraciones: una más actual de aspecto cuadrado (que recuerda al diseño del Land Cruiser J60) y otra más ‘retro’ con faros redondos (un guiño a los Land Cruiser J70 o J40). Toyota también hace hincapié en el hecho de que han aumentado la superficie acristalada al tiempo que han reducido el grosor de los pilares para mejorar la visibilidad y la luminosidad que llega al habitáculo.
Ya que hablo del interior, decir que sigue la misma fórmula vista hasta ahora en el nuevo Toyota Land Cruiser 250: es más funcional y más tecnológico. Porque mantiene mandos físicos para casi todas las funciones al tiempo que añade elementos como un cuadro de mandos digital o un sistema multimedia de última generación.
Tenemos además numerosos elementos inéditos en este modelo, como por ejemplo, el cargador inalámbrico para teléfonos compatibles, el sistema de proyección de información en el parabrisas o la batería de asistentes de conducción. Estos incluyen incluso el asistentes de mantenimiento en carril gracias a la adopción de una dirección con asistencia eléctrica. Y como podrás imaginar, el aumento de tamaño también se traduce en más espacio interior en las hasta siete plazas que puede ofrecer en tres filas de asientos.
El primer Toyota Land Cruiser híbrido de la historia
El Toyota Land Cruiser 2024 tiene el honor de ser el primer Land Cruiser de la historia que está disponible con un sistema de propulsión híbrido. Siguiendo la filosofía de la marca de ofrecer la mecánica adecuada para las necesidades de sus clientes en función de dónde vivan, este 4x4 llega con un impresionante abanico de mecánicas.
La más innovadora es la opción híbrida i-Force Max, que emplea un bloque turbo de cuatro cilindros y 2.4 litros con un motor eléctrico para producir hasta 330 CV de potencia y 630 Nm de par. Pero por desgracia para nosotros, no se comercializará en Europa y por el momento estará reservada exclusivamente a Estados Unidos y China.
El que sí llegará a Europa es el motor turbodiésel 1GD-FTV de 2.8 litros y cuatro cilindros con un sistema de microhibridación de 48V. Una mecánica que produce 204 CV de potencia y 500 Nm de par y que promete ofrecer unos consumos más contenidos en entornos urbanos y un funcionamiento más refinado, especialmente en su puesta en marcha.
Otras mecánicas disponibles en diferentes regiones del planeta incluyen un bloque de gasolina 2.4 turbo de cuatro cilindros (con 281 CV y 430 Nm), el ya conocido 1GD-FTV pero sin sistema eléctrico de 48V (con los mismos 204 CV y 500 Nm) o el ya clásico 2TR-FE, un cuatro cilindros atmosférico de 2.7 litros de gasolina (163 CV y 246 Nm). Todos los motores se asocian a un cambio automático de ocho marchas con convertidor de par excepto este último, que recurre a la antigua caja automática de seis velocidades.
Como buen Land Cruiser, este Land Cruiser 250 mantiene todas las herramientas para ser considerado un 4x4 auténtico: chasis de largueros y sistema de tracción 4x4 permanente con reductora y bloqueos central y trasero. Además, cuenta con unos asistentes electrónicos para conducción en campo todavía más avanzados y con soluciones innovadoras como la barra estabilizadora delantera activa.