El mayor traficante del mundo, una mente criminal sin escrúpulos, líder del Cartel de Medellín y en su día, el séptimo hombre más rico del mundo, fortuna que le sirvió para reunir una suculenta colección de coches. Pablo Escobar murió abatido a tiros el 2 de diciembre de 1993. Consigo se fue una de las mejores colecciones de vehículos que estuvieron expuestos, destruidos, en la Hacienda Nápoles: su hogar.