El clásico Shelby Cobra con motor Ford, obra del legendario Carroll Shelby, es uno de los coches más icónicos de la década de 1960. Este pequeño deportivo vitaminado ha sido, a lo largo de los años, objeto de multitud de réplicas y hoy sumamos un nuevo candidato a la basta lista. Se denomina Superformance MKIII-R y es una réplica con licencia del clásico Cobra de los 60.
Superformance es la única compañía que puede construir una réplica del Cobra con una licencia original de Carroll Shelby Licensing Inc., cuyo objetivo es brindar el aspecto clásico y el rendimiento del icónico deportivo descapotable complementado con toques modernos. Quizás su lanzamiento hoy no haya sido una casualidad, ya que el modelo original de Shelby apareció en varias escenas de la película Le Mans’66 (Ford v Ferrari) estrenada a finales del año pasado.
El Superformance MKIII-R es una réplica con licencia del clásico Cobra
“El Superformance MKIII-R es la combinación perfecta de un coche clásico de la vieja escuela con un toque de estilo moderno”, asegura el CEO de la compañía, Lance Stander. “El MKIII-R es una pieza de la historia de Estados Unidos, y con un gran lanzamiento en una película el año pasado donde destacó el Cobra, la popularidad de este vehículo está en su punto más alto. Nos preocupamos muchos para garantizar que el Superformance MKIII-R esté a la altura del legado icónico del Cobra”.
Esta réplica en cuestión difiere ligeramente del Cobra original. Tiene salidas de ventilación en los guardabarros y una entrada de aire en el capó, además de la presencia de un nuevo splitter delantero y un difusor trasero que añade algo de deportividad a las líneas curvas del Cobra, aunque el trabajo de pintura en Atlantic Blue y las rayas en color antracita son un claro guiño al modelo original de los 60.
Debajo de la carrocería de fibra de vidrio encontramos elementos modernos, como suspensión independiente con muelles Bilstein sobre amortiguadores telescópicos en el eje delantero y coilovers en el tren trasero. También se incluyen faros de LED y llantas de 18 pulgadas. En el interior tenemos detalles retro con toques modernos, como los medidores electrónicos que se complementan con el cuero vintage y los asientos con costuras del mismo color que la carrocería.
Al igual que otros coches de Superformance, esta réplica del Shelby Cobra se vende sin motor por 79.900 dólares (73.700 euros). Sin embargo, los kits están disponibles para la instalación de motores Ford V8 con transmisiones Tremec de cinco velocidades o automáticas de cuatro relaciones.