El CUPRA Ateca 2.0 TSI 190 CV DSG 4Drive de la prueba es la variante de acceso a la gama del SUV compacto de CUPRA. Un modelo este que mantiene todas las cualidades dinámicas de su hermano mayor y que sigue gozando de buenas prestaciones gracias a sus 190 CV de potencia. Todo ello a cambio de un precio de venta más interesante, pues los 45.190 euros de los que parte son casi 6.500 euros menos que lo que vale la versión más poderosa.
Como seguramente sabrás, el CUPRA Ateca fue el primer automóvil de la firma. Llegó al mercado hace ya seis años (en 2018) y desde entonces ha recibido sutiles actualizaciones. La última de ellas incluye, entre otras cosas, la incorporación de una segunda motorización que es precisamente la que te traemos en esta prueba.
Una mecánica 2.0 TSI con 190 CV y 320 Nm que mueve con mucha soltura este todocamino. No es que sea un cohete pues no llega a ser tan explosiva como la de Ateca VZ de 300 CV, pero ofrece un equilibrio muy bueno. Porque puedes explotar todas las prestaciones del motor si poner en apuros a un chasis con una puesta a punto muy dinámica.
De hecho y a pesar de ser un producto con unos cuantos años a su espalda, quizá demasiados para lo que se destila en la industria, el CUPRA Ateca es de lo mejor del segmento a nivel de comportamiento. Y aunque su habitáculo se puede percibir algo anticuado con respecto a los últimos lanzamientos de la marca, lo cierto es que por calidades, espacio y ergonomía de uso pocas pegas se le pueden poner.
A nivel visual, las diferencias entre el CUPRA Ateca 2.0 TSI 190 CV y su hermano mayor son mínimas. De hecho, se limitan fundamentalmente al diseño del difusor y a las salidas de escape, que quedan escondidas en el que nos ocupa mientras que el VZ luce cuatro tubos ubicados por parejas a cada lado.
Otros detalles que pueden ayudarte a saber ante qué versión del CUPRA Ateca estás son los frenos. El de 190 CV tiene pinzas flotantes con discos ventilados de menor diámetro (312 mm delante y 272 detrás) mientras que el de 300 CV cuenta con pinzas fijas delante y discos más grandes (340 mm en el tren anterior y 310 mm en el posterior).
El habitáculo es virtualmente idéntico en ambos. Destacaría los asientos tipo bucket, el cuadro de instrumentos digital con diseño exclusivo o ese volante deportivo con levas para manejar la caja de cambios DSG. Un elemento que opcionalmente puede integrar unos pulsadores satélite desde los que podrás seleccionar con más facilidad los modos de conducción o poner en marcha el coche.
Antes te comentaba que comparado con los últimos productos de la compañía el habitáculo del Ateca puede parecer desfasado. Pero compensa este pequeño hándicap con una facilidad de uso y ergonomía fantástica. Fíjate sino en ese climatizador bizona con mandos físicos que te permite ajustar fácilmente la temperatura o la velocidad del ventilador sin tener que apartar la vista de la carretera. Esto significa que no tendrás que recurrir a los vistosos pero engorrosos controles táctiles o a la pantalla como sucede con el CUPRA León.
La habitabilidad es buena en las plazas delanteras, con unos asientos que además de sujetar bien el cuerpo resultan cómodos. Los pasajeros que se sienten detrás tienen espacio de sobra en altura pero no tanto para las piernas o a lo ancho. El maletero, con 485 litros de capacidad, ofrece unas formas regulares por lo que es fácil aprovechar todo el volumen disponible.
El equipamiento disponible es muy amplio e incluye elementos como el cuadro de mandos digital, el sistema multimedia con pantalla táctil de 9,2”, Android Auto y Apple CarPlay con conexión inalámbrica, el control de crucero adaptativo, la frenada automática de emergencia, siete airbags o los faros y pilotos con tecnología de ledes para todas sus funciones.
Pero lo mejor de este CUPRA Ateca 2.0 TSI 190 CV DSG 4Drive es su comportamiento dinámico. Desde los primeros metros conduciendo este coche percibo que motor es tremendamente elástico, pues tiene mucha fuerza prácticamente desde el ralentí. Una sensación que posteriormente corroboro al analizar la ficha técnica, pues los 320 Nm que entrega están ahí desde las 1.500 a las 4.100 revoluciones por minuto.
Poco después de ese régimen, a 4.200 vueltas, ya alcanza la potencia máxima de 190 CV, que está disponible de manera constante hasta casi alcanzar el corte de encendido. Todo esto hace que este propulsor se sienta muy lleno en toda la franja de uso y más combinado con el rápido cambio DSG de siete velocidades que viene de serie. Este, por cierto, ofrece la función 'Launch Control' para garantizar la mayor capacidad de aceleración.
Con la tracción a las cuatro ruedas 4Drive, que es de tipo Haldex con un embrague multidisco de accionamiento electrohidráulico, consigue una buena motricidad independientemente del estado de la calzada. Y con la suspensión adaptativa opcional DCC, con amortiguadores regulables en tres posiciones, puedes hacer que las irregularidades de la carretera prácticamente desaparezcan o contar con un mejor control de la carrocería en función del tarado seleccionado.
Al volante ofrece un comportamiento más cercano al de un compacto de tinte deportivo que al de un SUV al uso. Esto se debe tanto a la presencia de una dirección rápida como, sobre todo, al buen ajuste del chasis, que es capaz de digerir sin ningún tipo de problema todo lo que el motor puede ofrecer. No menos importante para determinar esa agilidad de la que tanto hablo es el hecho de que el peso en orden de marcha se quede en 1.580 kilogramos.
Esto último afecta a todo: aceleración, frenada, cambios de dirección e incluso al consumo. Durante la semana que he pasado conduciendo este coche, haciendo un uso normal he conseguido medias por debajo de los 8,0 l/100km, lo que no está nada mal para un vehículo de su potencia y con tracción a las cuatro ruedas.
En definitiva, este CUPRA Ateca 2.0 TSI 190 CV DSG 4Drive me ha parecido un productazo que no me importaría en absoluto tener en mi garaje. Aunque no corra tanto, dinámicamente es tan bueno como su hermano mayor y encima es bastante más asequible.
Ficha técnica CUPRA Ateca 2.0 TSI 190 CV DSG 4Drive | ||
Motor | Cilindrada | 1.984 cc |
Cilindros | 4 en línea | |
Potencia máxima | 190 CV / 4.200 - 6.000 rpm | |
Par máximo | 320 Nm / 1.500 - 4.100 rpm | |
Alimentación | Tipo | Inyección directa, turbo e intercooler |
Transmisión | Caja de Cambios | Automática de doble embrague, 7 marchas |
Tracción | Total | |
Suspensión | Delantera | Tipo McPherson Resorte helicoidal Barra estabilizadora |
Trasera | Paralelogramo deformable Resorte helicoidal Barra estabilizadora |
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Frenos | Delanteros | Discos ventilados |
Traseros | Discos ventilados | |
Dimensiones | Longitud | 4.381 mm |
Anchura | 1.841 mm | |
Altura | 1.611 mm | |
Distancia entre ejes | 2.630 mm | |
Maletero | Volumen | 485 litros con 5 plazas |
Peso | Peso | 1.580 kg |
Prestaciones | Velocidad máxima | 212 km/h |
Aceleración 0-100 Km/h | 7,2 segundos | |
Consumo (WLTP) |
Combinado | 8,1 l/100 km |
Velocidad baja | 10,3 l/100 km | |
Velocidad media | 8,2 l/100 km | |
Velocidad alta | 7,0 l/100 km | |
Velocidad muy alta | 8,2 l/100 km | |
Emisiones | Emisiones de CO2 | 183 g/km Euro 6 - Etiqueta C |
Precio | Precio oficial | 45.190 euros |