Un hombre compró una autocaravana, pero parece que no quedó muy satisfecho con la adquisición, porque inmediatamente acudió de nuevo al concesionario, porque tenía algunos defectos. El problema llegó cuando exigió a la marca que asumiera los costes de la reparación y ésta se negó. Fue entonces cuando el comprador inició una campaña de desprestigio contra el fabricante. Ahora, un tribunal ha condenado al hombre que compró la autocaravana a pagar 20.000 euros como indemnización por vulnerar el derecho al honor y la propia imagen del vendedor.
El comprador comenzó a difundir todo tipo de comentarios y vídeos en las redes sociales, desprestigiando al vendedor. En una de esas redes, llegó a publicar casi una veintena de vídeos, y ya sabemos la velocidad a la que se propagan los comentarios en esas plataformas, con el daño que puede provocar en la reputación de una empresa.
Un hombre que compró una autocaravana deberá pagar 20.000 al fabricante por desprestigiarle
Finalmente, el caso llegó a los tribunales. En un primer momento, el juzgado de Primera Instancia de Totana, en Murcia, fijó una indemnización de 30.000 euros. Sin embargo, el demandado presentó un recurso contra este fallo y la sentencia, a la que ha tenido acceso EFE, lo estimó de forma parcial. Además, el tribunal revocó otra decisión de la resolución recurrida, que lo condenó a pagar otros 30.000 euros por el perjuicio económico sufrido por el demandante.
La autocaravana de GMC que expulsaba aguas residuales por el tubo de escape a principios de los 70
El juzgado declaró acreditado que el demandado utilizó varias redes sociales para desprestigiar al fabricante, a través de comentarios y vídeos, un comportamiento que supuso una vulneración del derecho al honor y a la propia imagen de la empresa vendedora. Además, la Audiencia señaló que el comprador utilizó también un foro relacionado con el sector de las autocaravanas para difundir comentarios.
El tribunal concluyó que el hombre que compró la autocaravana había tenido una clara intención de perjudicar y desprestigiar al fabricante, alertando a los futuros compradores.