El BMW XM se presenta con un doble cartel espectacular: por un lado, es el primer ‘M’ de la historia que cuenta con una mecánica electrificada, por otro, es el coche de serie más potente de la historia de BMW. Ya es oficial y solo habrá que esperar unos meses para que llegue a los concesionarios.
Como cabía esperar por lo visto en el prototipo, es una auténtica mole, un SUV de gran tamaño e imponente figura que, en parte por esto y en parte por la electrificación, marca 2.750 kilos sobre la báscula.
El acuerdo secreto de Citroën y BMW para utilizar la denominación XM
La marca alemana se ha contenido con el tamaño de los riñones de la parrilla, pero estos están muy definidos, los faros tienen un tamaño mínimo, el paragolpes presenta un intrincado diseño, los pasos de rueda no sobre salen en exceso, monta llantas de 21 pulgadas que en opción pueden llegar hasta las 23, el portón trasero es de grandes dimensiones, de nuevo los pilotos presentan unas dimensiones bastante reducidas y en el difusor se dejan ver dos salidas de escape dobles.
El interior muestra la habitual calidad de los modelos del fabricante, destacando especialmente el BMW Curved Display que integra el cuadro de instrumentos y la consola central. Hay cuatro posibilidades de tapizado, climatizador cuatrizona, iluminación ambiental y sistema de sonido Harman Kardon. Tiene capacidad para cinco personas.
Su aspecto más destacado es el mecánico. Combina un motor gasolina 4.4 V8 biturbo de 489 CV con un bloque eléctrico de 194 CV, consiguiendo una potencia total de 653 CV y un par máximo de 800 Nm. Se combina con una caja de cambios M Steptronic de ocho velocidades y tiene tracción integral. Gracias a ello acelera de 0 a 100 km/h en 4,3 segundos y alcanza una velocidad máxima limitada a 250 km/h (aunque se puede desbloquear a 270 km/h de manera opcional).
Un batería de 25,7 kWh complementa el sistema, otorgándole una autonomía eléctrica de entre 82 y 88 kilómetros. En este modo puede rodar a velocidades de hasta 140 km/h. Además, también puede operar en HYBRID y eCONTROL. Homologa un consumo de 1,5 – 1,6 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 33 – 36 g/km.
Cuenta de serie con el tren de rodaje M Professional adaptativo, que gracias a unos motores eléctricos de 48 V incluye amortiguadores controlados electrónicamente y estabilización activa del balanceo.
El tope de gama será el BMW XM LABEL RED, que se estrenará en otoño de 2023. Eleva la potencia del motor de combustión a 585 CV, lo que, sumado al bloque eléctrico de 197 CV, le convierte en el coche de serie más potente de la historia de la marca, alcanzando los 748 CV y los 1.000 Nm de par máximo. BMW no ha desvelado sus prestaciones, pero serán mejores que las el XM convencional.
El BMW XM comenzará su producción en diciembre de este año y estará disponible en primavera de 2023, pero por el momento la firma no ha comunicado cuál será su precio.
