BMW completa la oferta de motores del BMW Serie 5 para hacer un pleno de mecánicas electrificadas: las microhíbridas sirve de escalón de acceso, el BMW i5 actúa como tope de gama y entre medias se instalan las dos variantes híbridas enchufables del modelo, los 530e y 550e XDrive.
El BMW Serie 5 530e hace las veces de versión de acceso, combinando un motor gasolina 2.0 turbo tetracilíndrico con uno eléctrico que va incorporado en la transmisión automática de ocho relaciones para conseguir 299 CV y 450 Nm de par. El resultado es una aceleración de 0 a 100 km/h en 6,3 segundos y una velocidad máxima de 230 km/h.
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La variante superior es el BMW Serie 5 550e XDrive, que confía en un propulsor gasolina 3.0 de seis cilindros en línea e incorpora un motor eléctrico de mayor rendimiento, logrando una potencia conjunta de 489 CV, un par máximo de 700 Nm y, como indica el nombre, tracción a las cuatro ruedas. Esta configuración le permite completar el sprint hasta los 100 km/h en 4,3 segundos y ampliar su velocidad punta hasta los 250 km/h.
Ambas versiones comparten la misma batería, que tiene una capacidad de 19,4 kWh. Esto sirve para homologar una autonomía eléctrica de hasta 103 km en el caso del 530e, pero en el 550e XDrive se queda en 90 km, por su mayor rendimiento y prestaciones.
También comparten capacidad de carga, pudiendo soportar solo potencias de hasta 7,4 kW. Con ésta, en 3 horas y 15 minutos rellenan la pila por completo, proceso para el que son necesarias 11 horas y 45 minutos si se emplea una toma de corriente doméstica.
No se han desvelado los precios para España, pero sí se han concretado los que tendrán ambas versiones en el mercado alemán. El BMW Serie 5 530e estará disponible desde 65.300 euros y el BMW Serie 5 550e XDrive parte desde los 77.300 euros.