El Bentley Bentayga Diésel es el último en llegar, y el modelo que faltaba, a la alineación del primer SUV de la firma británica con sede en Crewe. Bajo el capó, los ingenieros han instalado el mismo motor V8 de tres turbos que da vida al Audi SQ7, por lo que tenemos un potente Bentayga con un bloque V8 d 4.0 litros apoyado por tres turbocompresores. Llegará al mercado antes de que finalice el 2016 por un precio que se situará en la barrera de los 160.000 euros.
Centrándonos en su apartado mecánico, el punto donde realmente innova el Bentley Bentayga Diésel, encontramos un V8 de 4.0 litros apoyado por dos turbocompresores y una tercera unidad eléctrica denominada ‘e-Boost’, lo cual arroja 435 CV de potencia a 3.750 rpm y 900 Nm de par motor máximo disponible desde las 1.000 rpm. Como cabe esperar, replica los 4,8 segundos en el cero a 100 km/h del Audi SQ7 (prueba), mientras que su velocidad punta se ha situado en 270 km/h, convirtiéndose así en el “SUV diésel más rápido del mundo”.
Con 2.390 kilogramos sobre la balanza (el motor diésel es solo 3 kg más pesado que el W12 de 6.0 litros biturbo), el Bentayga Diésel presenta un menor rendimiento en comparación al de gasolina, con 600 CV, pero la misma cifra de 900 Nm de par, aunque el bloque W12 ofrece esta cifra de par de torsión a partir de las 1.350 rpm. Ni que decir tiene que el Bentayga de gasolina sigue siendo considerablemente más rápido que la unidad de gasóleo, alcanzando los 100 km/h desde parado en 4,1 segundos y alcanzando los 301 km/h de velocidad punta.
Sin embargo, mientras el motor W12 registra un consumo medio de 13,1 litros a los 100 kilómetros, el V8 turbodiésel se queda en 7,9 litros, así como unas emisiones de 210 g/km de CO2. Mientras que Bentley (y Lamborghini) han decidido no acudir al Salón de París 2016, la firma británica ha aprovechado el tirón de estos días previos para presentar esta novedad en la alineación del Bentayga.
