En 1977, la marca británica, entonces propiedad de los estadounidenses Peter Sprague y George Minden, fabricó el Aston Martin Bulldog, un superdeportivo equipado con motor central con el objetivo de que se convirtiera en el coche de producción más rápido del mundo.
Aston Martin se puso un objetivo muy ambicioso, alcanzar los 380 km/h, pero se quedó en ‘sólo’ 307,38 km/h, en las pruebas que realizó en 1979 en el circuito de pruebas MIRA del Reino Unido. Inicialmente, la marca había planeado construir una pequeña tirada del Bulldog para algunos clientes, pero el proyecto se canceló por razones de coste y no se siguió desarrollando. Posteriormente, el único prototipo construido se vendió.
El Aston Martin Bulldog alcanza su récord de velocidad 46 años después
A relentless pursuit of intensity.
The feat that was never reached in 1979. The Aston Martin Bulldog reaches 200mph in 2023. #AstonMartin #INTENSITYDRIVEN pic.twitter.com/8cIm5aaOCv
— Aston Martin (@astonmartin) June 7, 2023
A diferencia del Bulldog, en aquella época también estaba el famoso Lagonda, del que si se construyeron algunas unidades y hoy es uno de los coches más exclusivos del mundo.
46 años después, el Aston Martin Bulldog ha vuelto a realizar una prueba de velocidad y esta vez sí ha superado la barrera de las 200 mph (321,87 km/h). Fue la semana pasada en una antigua base de la Real Fuerza Aérea en Campbeltown, Reino Unido, con el piloto Darren Turner al volante. Turner fue capaz de poner al Bulldog a 330,56 km/h, la velocidad máxima alcanzada.
Sigue estando lejos del objetivo que se marcó Aston Martin en 1977, pero sin duda demuestra que este prototipo fabricado hace más de cuatro décadas corre mucho más que algunos deportivos actuales. Para ello, utiliza un V8 turboalimentado de 5.3 litros, que desarrolla una potencia de entre 600 y 700 CV, una cifra completamente disparatada para los años 70.
Su actual propietario, Phillip Sarofim, lo restauró de arriba abajo para alcanzar su velocidad máxima, un proceso que conllevó 18 meses, a marco de la compañía británica Classic Motor Cars. Nunca es tarde si la dicha es buena.