El CES 2016 ha sido la feria elegida por la mayoría de fabricantes para presentar sus últimos avances tecnológicos. La compañía de Wolfsburgo no iba a ser menos y hasta Las Vegas ha llevado el Volkswagen Budd-e concept.
Este vehículo, descrito como el microbús del siglo XXI, llama la atención por su imagen, donde el diseño de los grupos ópticos, sobre todo los delanteros, marcan la diferencia. También su amplia parrilla con iluminación ambiental compuesta por LED.
Dentro es donde Volkswagen ha puesto toda ‘la carne en el asador’. Cuenta con una pantalla curvada compuesta de tres módulos totalmente configurables. Además, equipa un volante multifunción que adopta botones que responden a ligeros toques y una banqueta corrida en la parte posterior del vehículo, a la que la acompaña otra pantalla en el lado izquierdo.
La gran mayoría de funciones pueden ser activadas mediante controles táctiles o gestuales, pero también pueden ser gobernados mediante el sistema de reconocimiento de voz avanzado que se activa al decir: “Hola Budd-e”. Es inteligente, por lo que si un pasajero ordena, por ejemplo, subir la temperatura, el vehículo solo incrementará los grados en la zona donde se haya ordenado.
El Volkswagen Budd-e concept, que toma la plataforma modular MQB –puede alojar baterías de gran tamaño y componentes para el sistema de propulsión eléctrica-, tiene una longitud de 4,59 metros, una anchura de 1,93 metros, una altura de 1,83 metros y una distancia entre ejes de 3,15 metros, por lo que se situaría por tamaño entre la Touran y la Multivan T6.
El Budd-e se mueve gracias unos motores eléctricos, uno en cada eje, que son alimentados por una batería de 101 kWh. El vehículo puede alcanzar los 150 km/h y recorrer hasta 600 km.
