Ya el año pasado salió a subasta el Benetton B191 de Fórmula 1 de Michael Schumacher, el cual utilizó en sus primeras carreras y con el que consiguió su primer podio en una prueba de la categoría reina del automovilismo. Esta vez te traigo otro monoplaza relacionado con el campeón alemán y sus inicios en la Fórmula 1. Y es que el próximo 21 de mayo saldrá a subasta el Benetton B191 de Nelson Piquet y Michael Schumacher en una subasta organizada por la casa Bonhams en el circuito de Spa-Francorchamps, en Bélgica.
Pese a que puede parecer el mismo monoplaza subastado el pasado año, son dos unidades diferentes, ya que el primero fue utilizado íntegramente por Schumacher y el que sale a subasta en mayo fue el que le permitió a Nelson Piquet registrar su última victoria en Fórmula 1 en el GP de Canadá de la temporada 1991 antes de retirarse oficialmente, anotando además la única victoria obtenida por este coche.
Inicialmente había sido entregado a Roberto Moreno, más tarde a Piquet y un novato Schumacher pudo ponerse al volante un poco más tarde de este monoplaza, aunque compartía coche con Moreno (el que fue subastado el año pasado). Finalmente, para la temporada 1992, el coche fue actualizado a las especificaciones B191B de la escudería Benetton para las tres primeras carreras de la temporada y fue a manos de Martin Brundle, otro famoso piloto de F1, quien se encargaría de conducirlo.
Tras la temporada de 1992, el coche pasó a formar parte de un museo después de una exhaustiva restauración por parte de un equipo profesional de Fórmula 1, quien revisó el chasis, el motor y la caja de cambios para asegurarse de que el coche está en perfectas condiciones de utilización. El proceso de restauración, además, garantiza que se encuentra en especificaciones originales, a excepción de algunas actualizaciones de seguridad exigidas por la FIA.
Encargado de darle vida al Benetton B191 de Nelson Piquet y Michael Schumacher se encuentra un motor V8 3.5 Ford Cosworth que desarrolla una potencia de 650 CV a unas impresionantes 13.000 rpm en un vehículo que apenas pesa 505 kilogramos gracias a un chasis monocasco de carbono. Según la casa de subastas Bonhams, el monoplaza ganador de 1991 buscará un nuevo propietario que esté dispuesto a pagar entre 750.000 y 950.000 euros de precio estimado.
Fuente e imágenes: Bonhams
