Habrá quien se frustre por no poder conducir un superdeportivo de alta gama porque no le llegue el bolsillo. Pero debe ser aún más exasperante disponer de todo el dinero del mundo y tampoco poder subirte a uno lujoso deportivo, simplemente, porque no cabes. Shaquille O'Neal recurrió a una costosa solución para meter sus 2,16 metros y 147 kg en un Lamborghini Gallardo.

La exestrella de la NBA es, probablemente, el uno de los hombres más famosos del mundo y también uno de los más ricos. En 2008 quiso comprarse un Lamborghini Gallardo, pero había un problema: no podía entrar en el coche. Así que mandó construir una versión convenientemente adaptada para él.

La costosa solución de la que tiró Shaquille O'Neal para meter sus 2,16 m y 147 kg en un Lamborghini Gallardo

Shaquille O'Neal Lamborghini Gallardo

Así lo cuenta en su libro Shaq Uncut: My Story, en el que explica cómo encargó una versión del Lamborghini Gallardo con batalla extralarga. Para ello, tuvo que comprar dos unidades, uno nuevo y otro usado. Luego contrató a la familia Gaffoglio de Argentina, especializada en metalistería, que se encargó de realizar una delicada operación: unir los dos Gallardo. El resultado un Gallardo claramente más largo que el modelo original, pero sin resultar demasiado llamativo.

Lógicamente, esta operación no fue barata, costó más de 600.000 dólares. Según cuenta el propio Shaq en su libro, con un poco de humor, "la razón por la que costó tanto fue que compré un Lamborghini nuevo y luego compré otro viejo y destartalado y, para que yo cupiera dentro, tuvieron que cortar los dos por la mitad y luego pegarlos con superglue".

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Teniendo en cuenta la envergadura del exjugador de Los Lakers (2,16 metros y 147 kg), esta operación de “coser” dos Lamborghini Gallardo era necesaria. Incluso, todavía sigue pareciendo demasiado pequeño. Pero un día, a Shaq dejó de gustarle su superdeportivo. Fue durante un viaje a Ft. Lauderdale, en Florida, cuando hizo un trompo a demasiada velocidad y estuvo a punto de estrellarse. Ya no quiso conducirlo más y lo vendió por 110.000 dólares a Amare Stoudemire. Actualmente, se desconoce el paradero del coche.

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