Dean Wills, un antiguo ejecutivo de Coca Cola, se construyó su propio circuito. ¿La razón? Perdió su carné de conducir en 1996 por conducir muy rápido en una carretera de la costa de de Nueva Gales del Sur y quería disfrutar del placer de conducir. ¿Y qué mejor manera de hacerlo que construyéndose una pista valorada en unos 10 millones de dólares (7,6 millones de euros)?
El trazado, situado en el extremo sur de Kulnura (Australia), tiene tres kilómetros de longitud y 22 curvas. Dean Wills insiste que no es un circuito, por ello ha prohibido que se disputen carreras en él, según informa Jalopnik.
Son muy pocos los afortunados que han podido rodar en esta pista: familiares, amigos y el expiloto de Formula 1 Jack Brabham.
Dicen que el dinero no da la felicidad…