Durante el viaje, tanto el Porsche Cayenne S E-Hybrid como el Panamera S E-Hybrid hicieron un alto en el camino. En el Baikal, el lago de agua dulce más grande del mundo que, en ese momento, contaba con una gruesa capa de hielo en su superficie consecuencia de las gélidas temperaturas que se registran en esa región siberiana, y organizaron una sesión fotográfica cuyo resultado habla por sí solo.
El Porsche Cayenne S E-Hybrid comparte su sistema de propulsión con el Panamera Hybrid, el cual está compuesto por un motor de gasolina V6 sobrealimentado de 3,0 litros que entrega 333 CV y un propulsor eléctrico de 95 CV, el cual permite alcanzar 125 km/h en modo eléctrico. El conjunto proporciona a ambos modelos Porsche una potencia máxima de 416 CV y 560 Nm de par motor, permite pasar de 0 a 100 km/h en 5.4 segundos y alcanzar una velocidad máxima, en el caso del Porsche Cayenne, de 243 km/h.
Esta aventura de 7.000 kilómetros supone un reto y una demostración a la fiabilidad de los modelos híbridos frente a las adversidades climatológicas más extremas del mundo. El resultado de este viaje se interpreta como un desafío para Porsche, el cual pretende introducir más vehículos híbridos en el futuro con el fin de reducir sus emisiones de dióxido de carbono.