Las subidas de montaña o ‘hillclimbs’ son una especialidad del mundo del motor que es impactante y en la que muchos modelos dedicados al rally han demostrado er muy efectivos. Este Ford Sierra se ha preparado durante años para afrontarlas con garantías y, a la vista está, lo ha conseguido.
Ha sido fabricado por George Kexagias, que no ha escatimado en mejoras para el Ford: ha rebajado su peso hasta quedarse en 1.000 kilos, que se dice pronto; ha instalado una caja de cambios secuencial de seis relaciones, conserva la configuración de tracción trasera y bajo el capó monta un motor Cosworth YB Turbo de 2,0 litros que entregada nada menos que 500 CV de potencia.
De los rallyes a las subidas: coches perfectos para hacer ascensos
Los datos son apabullantes, pero verlo (y escucharlo) en acción impresiona todavía más.