Grata sorpresa la que nos hemos llevado. Citroën E-Mehari, así se llama el vehículo con el que la compañía de los chevrones quiere rescatar el espíritu de aquel coche desenfadado que nos conquistó en los 70 y parte de los 80.
Este utilitario de 3,81 metros de longitud, 1,87 metros de anchura y 1,65 metros de altura está desarrollado en colaboración con el Grupo Bolloré. De hecho toma el Blue Summer de esta firma como base para crear este vehículo con carrocería de plástico y propulsión 100% eléctrica.
Destaca por su imagen, que recuerda al Citroën Mehari original pero adoptando el diseño del C4 Cactus, tanto en su frontal como en las llantas. Está compuesto por paneles de plástico, que se pueden personalizar en múltiples colores, y capota manual. Asimismo, adopta asientos impermeables y banqueta corrida para las plazas traseras. Incluso el piso tiene puntos de drenaje.
Equipa una batería de polímeros de litio de 30 kWh de capacidad que le permite recorrer hasta 200 km. Presume de una potencia de 68 CV, aunque la nominal utilizable es de 48 CV, y de una velocidad punta de 110 km/h. Si se utiliza un enchufe convencional de 10A tarda 13 horas en cargarse, aunque Citroën tiene en mente restar horas con un sistema de recarga rápida.
El Citroën E-Mehari, que será fabricado en la planta que PSA Peugeot Citroën tiene en Francia, llegará en la próxima primavera.
