La fiabilidad de un vehículo es un aspecto muy importante a la hora de decantarte por su compra. El hecho de que tengas que pasar más o menos por el taller puede motivar que acabes muy 'quemado' con tu coche. Por eso en esta lista te indicamos varios modelos de berlinas poco fiables que podrían ponerte de los nervios al pasar más tiempo en el mecánico que rodando en la carretera.
Chevrolet Impala
Multitud de fabricantes han abandonado el nicho de los sedán. Algunos de ellos han dejado de lado modelos icónicos que han servido como transporte a varias generaciones de familias. Y uno de ellos ha sido Chevrolet con el Impala, cuya fabricación cesó en el año 2020.
Ahora es una buena ocasión para comprarlo en el mercado de segunda mano, si bien en España es un modelo muy raro. Y casi que mejor, porque es una de las berlinas poco fiables que te desesperarán. Su mantenimiento y reparaciones a diez años vista te llevarán, de media, unos 12.500 euros.
Cadillac CT5
La relación entre el valor de producto y el precio que Cadillac pide por su CT5 parece un chollo. Un coche muy lujoso que, en Norteamérica, cuesta desde poco más de 35.000 euros al cambio. Su equipamiento de serie es amplio y su comportamiento dinámico resulta muy satisfactorio.
Ahora bien: existen algunos 'peros' importantes. Sus terminaciones están ligeramente por debajo de las de sus rivales alemanes, pero este yanqui es mucho menos fiable según Consumer Reports o Car Edge. De hecho, Car Edge estima el coste de mantenimiento en diez años por encima de los 9.000 euros.
Chrysler 300
Con una estimación de coste de reparaciones y mantenimiento de casi 8.000 euros al cambio durante la primera década conduciendo un Chrysler 300, esta berlina no supone una buena opción a la hora de decantarse por un coche de este tipo. Aun así, dado su espacio, no es caro, ya que cuesta desde unos 35.000 euros.
Sin embargo, algo que no parece tan atractivo es que tiene un 22,92% de posibilidades de necesitar una reparación importante en el período mencionado. Así que en caso de hacerte con la versión básica, en cinco años te gastarás en él casi 45.000 euros entre reparaciones, compra, mantenimiento, desgaste y seguro.
Chrysler Sebring
Los coches sedán de la marca Chrysler son más costosos de mantener, de media, que la mayoría de las berlinas de otros fabricantes. Y el Sebring no es una excepción. Un coche que dejó de elaborarse a principios de la pasada década después de tres lustros en el mercado.
Las unidades que puedes encontrar en las webs de coches de ocasión son realmente asequibles... en cuanto a compra. No obstante, te recomendamos que no te decantes por él a no ser que estés dispuesto a pagar unos 17.000 euros de media en reparaciones a lo largo de sus primeros diez años de vida. Y si es más antiguo, pues más aún.
Dodge Charger
El Dodge Charger es uno de los principales iconos en lo que respecta a los muscle cars norteamericanos. Por eso es una pena que esté en esta lista de las berlinas menos fiables del mercado. Además, aumenta su atractivo más si cabe teniendo en cuenta que a partir del año que viene su futuro será 100% eléctrico.
La última generación es muy refinada y se presenta como un sedán de cuatro puertas muy atractivo. Sin embargo, hay que tener en cuenta que su coste de mantenimiento y averías en una década casi alcanza los 8.000 euros, siendo este Dodge unos 700 euros más caro de mantener, de media, que su competencia.
Lincoln MKS
La división de lujo de Ford fabricó este sedán premium entre 2009 y 2016 antes de que el Lincoln Continental tomase su relevo por completo. El Lincoln MKS ofrecía una imagen de lo más distinguida, pero siendo sutil. No era estridente, tenía clase. Además, contaba con un espacio interior muy bueno.
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Uno de sus puntos negativos era su visibilidad a la hora de conducirlo, pero lo peor que tenía era, claramente, su fiabilidad. De hecho, según Repair Pal, su coste de mantenimiento y averías ascendía a casi 900 euros al año, siendo aproximadamente 650 euros más caro anualmente que el promedio.
Tesla Model S
El último de los modelos en este ranking de las berlinas poco fiables con altos costes de mantenimiento es también uno de los coches eléctricos más vendidos. Sí, has adivinado: se trata del (prueba) Tesla Model S. Y eso que, supuestamente, una de las ventajas de estos modelos es el menor coste de mantenimiento.
Se supone que tienen menos cosas susceptibles de estropearse en relación a un coche de combustión. Ahora bien, en el Model S el coste de mantenimiento en los primeros diez años de vida del modelo es de unos 830 euros por año, una cifra aproximadamente 650 euros superior a la media. La dificultad a la hora de encontrar piezas y el precio de la mano de obra de Tesla tienen gran parte de culpa.
