Los 70 y 80 fueron los años dorados de los rallys, una época en la que los fabricantes utilizaban el campeonato de rally para comercializar sus productos. Por aquel entonces, la FIA obligaba a las marcas a fabricar una serie limitada de unidades del coche con el que querían participar en la competición. Fue así como nació el Renault 5 Turbo 2 ‘Cévennes’.
En Boulogne-Billancourt trabajaron duro para convertir el pequeño y exitoso utilitario francés en una máquina de carreras. Añadieron un turbo Garret T3 al modesto motor 1.4, que fue colocado en posición central-trasera. Colocaron un cambio de cinco velocidades procedente del Renault 30 TX y la carrocería fue ensanchada a conciencia, aumentando en 23 centímetros su tamaño.
Renault 5 turbo 2 ‘Cévennes’, la versión de calle del R5 Turbo de rally

El Renault 5 Turbo era un verdadero coche de carreras, pero más impresionante era vero en manos de pilotos profesionales. Renault Sport le dio un enfoque original, ya que, a diferencia de otros fabricantes, los franceses querían ofrecer a sus equipos un coche que funcionara como la versión de fábrica. El resultado fue el nacimiento de ‘Cévennes’, en 1981, una versión de calle del Renault 5 Turbo Grupo 4.
Se construyeron 20 unidades con diferentes kits de potencia: 185, 200 y 250 CV. El modelo que te traemos hoy es una unidad de 1986, el último año de producción. Luego pasó por varias manos, entre ellas, Gilles Ciamin, piloto de acrobacias y padres del piloto de WRC3, Nicolas Ciamin, hasta llegar a Patrick Duflot, dueño de Ferry Développement.
Comportamiento equilibrado y refinado

Antes de venderlo a su actual propietario, Duflot lo restauró y lo preparó en su taller, entre junio y marzo de 2021. El coche conserva su carrocería original y recibió una configuración del Grupo B. El motor fue reconstruido por completo, siguiendo los estándares de Ferry Développement, y se le instaló una caja de cambio ‘Cévennes’ reforzada y más corta. También recibió un eje delantero reforzado, discos de freno ventilados carbono-Lorraine, unas llantas de 14 pulgadas de aluminio Minilite, una jaula antivuelco Matter FIA.
El motor ha sido sometido a varias pruebas durante cinco horas y 150 km. El turbo tiene un funcionamiento poderoso, pero sin ser violento, y el control de la dirección es precisa en el eje delantero. La capacidad de frenado es firme y equilibrada y los cambios ágiles y precisos. Un coche fabuloso para conducir y para escuchar el sonido de su motor. Ahora, esta leyenda del rally está a la venta, por un precio estimado que oscila entre los 75.000 y 105.000 euros.
Fuente: Classic Driver