Una de las novedades del Salón de Ginebra 2017 ha sido oficialmente revelado antes de que la cita suiza abra sus puertas a la prensa. Se trata del Mitsubishi Eclipse Cross, el nuevo SUV de la firma de los tres diamantes que, no solo rescata una denominación clásica de la compañía, sino que da el salto a un segmento en el que no tenía representación, el de los crossovers compactos. No llegará al mercado hasta principios del próximo año, aunque ya sabemos muchos de sus detalles y el aspecto definitivo.
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Comenzando por el apartado estético, el nuevo Eclipse Cross es muy similar al estilo de diseño de Mitsubishi. En el frontal encontramos faros afilados y una parrilla delgada, donde el parachoques se une a los propios faros mediante unas extensiones cromadas y a la parrilla mediante una sección en negro brillante. El estilo anguloso de la compañía se deja ver no solo en el frontal, sino en el resto de la carrocería, como la pronunciada línea lateral, la caída de tipo coupé que divide la luneta trasera en dos secciones a partir del grupo óptico trasero del estilo del nuevo Honda Civic, así como un parachoques posterior que emula un difusor integrado. Detalles como los pasos de rueda con protecciones de plástico, el spoiler o el techo panorámico completan el conjunto.
Mientras tanto, el interior nos deja más muestras de ese estilo atrevido y deportivo del exterior. El habitáculo del Mitsubishi Eclipse Cross cuenta con una consola central dividida en dos niveles y coronada por una pantalla para el sistema de infoentretenimiento que se controla mediante el Touchpad Controller y ofrece compactibilidad con Apple CarPlay y Android Auto, un head-up display y tapicería de cuero con costuras en contraste dependiendo del acabado.
El apartado mecánico está presidido por dos unidades de cuatro cilindros de gasolina y diésel del que aún no se han especificados las cifras de rendimiento. Por un lado, el propulsor de gasolina es un 1.5 litros de inyección directa que se asocia a una transmisión automática CVT de ocho velocidades con control manual deportivo mediante las levas integradas tras el volante. Mientras tanto, una unidad turbodiésel de 2.2 litros con inyección directa se asocia a una transmisión automática de ocho relaciones.
Mitsubishi asegura que el Eclipse Cross ofrece un sistema de tracción a las cuatro ruedas controlado electrónicamente, el cual envía la cantidad de par necesaria al eje trasero dependiendo de la situación y la superficie de la carretera. Por último, la firma japonesa ha tratado de aumentar la rigidez del vehículo con una barra estabilizadora de tres puntos en el tren delantero y el uso estratégico de la unión estructural en la parte trasera.