Una fórmula que al fabricante bávaro le ha salido a pedir de boca. La combinación de los acabados, la dinámica de conducción característicos de la marca y las ventajas funcionales de un vehículo de cinco puertas con dimensiones compactas. Un segmento de mercado que BMW no estaba explotando hasta el año 2004, año en el que aparece el Serie 1 y da comienzo una vuelta de tuerca más a los modelos del fabricante de Múnich.
La firma de Múnich acaba de presentar el BMW Serie 1 2015, la última actualización a la que se ha sometido el compacto de la marca alemana. Para la ocasión, luce un frontal y una zaga rediseñados, mejora el equipamiento de serie y dispone de una gama de motores ampliada.