Sabrás perdonar lo tajante del titular, a menos que compartas el pensamiento, pero ¡es que no hay otra palabra más acorde tras la presentación! El prototipo inicial -no funcional aún- nacido de la colaboración entre Aston Martin y Red Bull Racing ha dejado estupefactos a todos. Sus pretensiones son, literalmente, una locura para estos tiempos. Bastan los dedos de una mano para contarte el porqué.