Bugatti Veyron Super Sport
El primero de los superdeportivos más lentos que el Tesla Model S en aceleración es todo un icono. El Bugatti Veyron en su versión Super Sport. Esta variante llegó a romper todo tipo de récords y se convirtió en uno de los más aclamados de todos los tiempos.
De hecho, fue una de las terminaciones más populares de este Bugatti, cuyo motor W12 llegaba a producir cerca de 1.200 CV de potencia. Con ellos, la capacidad de acelerar de 0 a 100 km/h llegó hasta los 2,5 segundos, una cifra a todas luces sorprendente para un coche de más de 1.950 kg.