Maserati GranCabrio
Tras fichar por Ferrari, un Maserati GranCabrio fue entregado a Fernando Alonso para que se desplazase de un sitio a otro. Con su V8 no resulta el superdeportivo más rápido del mundo, pero ese nunca ha sido su objetivo. Lo que quería era, más bien, ser el centro de todas las miradas, y eso bien que lo consigue con un diseño clásico y moderno a la vez. Una belleza. ¡Y cómo suena!
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