Un éxito abrumador
El Ford Mustang se presentó en 1964 en Nueva York, a diferencia de otros coches de la época. Además, tenía un precio de 2.300 dólares americanos, lo que suponía una ganga. Estos dos factores le llevaron a vender 22.000 unidades… en el día de su presentación. Superó las expectativas por 12.000 ejemplares.
En el logo del Mustang, el caballo simplemente está en el aire por el impulso de su velocidad, pero en este preciso momento, ninguna pata delantera ni trasera, contacta con la tierra.
De ahí su tremendo impacto de veloz.