Daimler “Reitwagen”
Quizá, de los coches más singulares de Mercedes, este Daimler Reitwagen sea el más curioso de todos. Fue el encargado de mostrar, en 1885, la utilidad de un motor de combustión en un vehículo. Porque lo cierto es que ni siquiera es un coche; fíjate bien: tiene dos ruedas.