Porsche 911 GT3 RS
Entre la lista de los coches de Sabine Schmitz destacó, sin duda, su 911 GT3 RS. Este Porsche era uno de sus favoritos para meterse en el circuito y ‘jugar’ con él, si bien estamos hablando de un superdeportivo bastante exigente de llevar al límite. Hay que tener mucha pericia, como claramente era el caso.
Y es que no solamente es agresivo por estética, con esas tomas de aire o ese pedazo de alerón fijo. También lo era en su comportamiento, cortesía de un motor bóxer atmosférico de 4,0 litros de cilindrada y una potencia que llega hasta los 520 CV. Un coche de lo más reactivo y deportivo. Muy rudo.