Saab 9-7X
Durante esta década, General Motors buscaba desesperadamente ampliar la gama de Saab. Por eso apostó por el 9-7X, que de Saab solo tenía el nombre, pues era un Chevrolet Trailblazer de la época con otra carrocería. Mismos motores, misma transmisión, mismo interior. Lo cierto es que se intentó, pero los compradores de la marca sueca no querían un Chevrolet rediseñado.