Seat Toledo
La tercera generación del Toledo no estuvo muy acertada por parte de Seat. El principal fallo de este modelo fue, como en otros tantos, el diseño y la concepción dentro de un segmento. Un vehículo que era claramente un monovolumen con un saliente en la zaga a modo de ampliación de maletero que solo triunfó comercialmente cuando se rediseñó como Altea XL.