Mercedes Clase X

La firma de Stuttgart se vio obligada a destrozar 125 Mercedes Clase X justo después de que fueran construidos. De esta forma, pasaron directamente de la planta de producción de la Zona Franca de Barcelona al desguace. Mercedes canceló el contrato de fabricación que tenía con dicha planta de manera prematura y como los que ya estaban listos no cumplían con las últimas normas anti contaminación, fueron achatarrados para evitar tener que gastar dinero en suministrar recambios en un futuro.