Enciende la calefacción
También puedes arrancar el coche, encender la calefacción y la luneta térmica y dirigir el chorro de aire caliente al parabrisas. De esta forma, el hielo se ablandará y podrás quitarlo mejor con la ayuda de una rasqueta. No es normal que se forme hielo si dejas el coche en el interior de tu garaje, pero, si ocurre, no dejes el coche arrancado con la calefacción, porque podrías intoxicarte con el monóxido de carbono.