4- Una depreciación lenta
Analizando el mercado de ocasión, encontramos que vehículos eléctricos con algunos años, pero con un kilometraje no demasiado alto, mantienen un valor de reventa aún algo elevado. Es una oportunidad ideal para comprar un coche eléctrico, ya que, en caso de querer venderlo más tarde, la depreciación no será tan acusada como ocurre, por ejemplo, en los coches diésel.