Volkswagen Beetle

Cuando en 1933 Hitler pidió a Ferdinand Porsche un… coche popular, con capacidad para dos adultos y tres niños, que alcanzase una velocidad máxima de 100 km/h y que debiese costar no más de 990 Reichsmarks, a su autor no se le hubiese pasado por la cabeza que en el siglo XXI, todavía seguiría vivo el automóvil que idearía su mente.

Y así es, en el 2011 ha llegado la tercera generación del Käfer, Escarabajo, Beetle, Vocho, Coccinelle, Fusca, Maggiolino, 甲虫 o como quieras llamarle. Tiene un gran parecido con el modelo comercializado en 1998, pero a diferencia de éste, es más largo (+15,2 cm), más ancho (+8,4 cm), pero más bajo (-1,2 cm). Tiene una longitud de 4,28 metros, una anchura de 1,81 metros y una altura de 1,48 metros. También se ha visto reducida la altura de las plazas delanteras, pasando de 1,08 metros a 1,04 metros, aunque la firma alemana asegura que no supone ningún problema. Por su parte, el maletero se ha visto ampliado 101 litros, con lo que ahora tiene un volumen de carga de 310 litros

El Volkswagen Beetle tiene unas formas menos redondeadas. Incorpora grupos ópticos formados por LED. El interior gana enteros gracias a una consola mucho más moderna y una salpicadero más actual, donde se han utilizados materiales de mejor calidad y en el que se puede colocar tres indicadores que muestran la temperatura del aceite, la presión de sobrealimentación del turbocompresor y el tiempo cronometrado. Además, equipa unos asientos muy envolventes y un volante de nueva manufactura.

Es posible tener un habitáculo muy luminoso gracias al techo panorámico que se puede elegir en opción y que absorbe el 99% de los rayos ultravioleta y el 92% del calor.

De mover al Volkswagen Beetle se encargarán una serie de motores turboalimentados, tanto diésel como de gasolina, con potencias comprendidas entre los 105 y los 200 CV.

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