El Libro Guinness de los récords informa de que el 19 de diciembre de 2012 Nic Case consiguió con su coche de radiocontrol denominado ‘Bullet’ los 276,74 km/h, estableciendo un hito en lo que a velocidad alcanzada por un vehículo a pilas se refiere.
A principios de año, Case volvió a superarse, ‘tocando’ los 302 km/h. Pero no conforme con esta cifra, ha vuelto a romper su propio récord, poniendo el ‘Bullet’ a 315 km/h. Lo ha conseguido con el mencionado coche de radiocontrol, pero modificado para la ocasión. Este pequeño ‘torpedo’ está diseñado y construido por Chase, equipa tracción a las cuatro ruedas y tiene un motor eléctrico al que le dan vida una docena de baterías de polímero de litio de 5000 mAh.
Estamos seguros de que en pocos meses volverá a la carga…
Fuente: Carscoops