La pista de pruebas de Mercedes-Benz cumple 50 años

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La firma de la estrella está de celebración, ya que la pista de pruebas de Mercedes-Benz cumple 50 años desde que fue inaugurado su primera sección. La famosa pista está situada en Stuttgart, muy cerca de una de las plantas de producción más importantes de la compañía y es donde se testan sus turismos, camiones, Unimogs, deportivos, autobuses y coches de carreras.

Hace exactamente 50 años, Mercedes inauguraba su famosa pista de pruebas situada en Stuttgart, aunque el proyecto se había iniciado un año antes, tras casi otros tres años de discusiones entre los jefes de la empresa. El primer segmento estrenado incluyó una pista circular con diversas superficies como el basalto azul, el concreto, el asfalto resbaladizo y los adoquines. Además, un sistema de rociadores integrado permite realizar pruebas en superficies húmedas.

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Ya hace medio siglo, Mercedes tenía una cartera muy amplia de vehículos que va desde turismos y familiares hasta camiones, Unimogs, coches deportivos, autobuses y coches de carreras. Tras ser estrenada la primera sección de la pista de pruebas se hizo evidente que todavía no era adecuada para los diferentes tipos de vehículos comercializados. Los ingenieros querían un lugar para conducir a alta velocidad, realizar pruebas en carretera, así como una sección para vehículos comerciales.

Estas necesidades fueron satisfechas con la ampliación gradual de la pista de pruebas. El fabricante alemán explica que la longitud acumulada de todas las secciones es de 15.460 metros, incluyendo los 3.018 metros de pista de pruebas a alta velocidad. Por su parte, la velocidad máxima teóricamente alcanzable en la pista peraltada es de unos 200 km/h, pero esto “sería físicamente casi insoportable para un ser humano”.

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Curiosamente, el objetivo de la pista peraltada es poder conducir el vehículo a una velocidad de 150 km/h sin poner las manos en el volante. Como explica la compañía, a ese grado de inclinación no existen fuerzas laterales que impacten sobre los neumáticos, por lo que el vehículo permanece en la pista a lo largo de la curva sin necesidad de actuar sobre la dirección. A lo largo de las décadas, la pista ha ido evolucionando para adaptarse a las nuevas necesidades, como la incorporación de una nueva sección que permite medir los niveles de ruido en marcha.

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